Ya que leyeron un poco sobre qué es lo que me motiva (si no lo han leído click AQUI), quisiera darles mi opinión sobre cuál es la importancia de la escuela de los libros, pero más importante creo yo, la escuela de la vida.
No estoy en contra de la educación, al contrario, creo yo que es muy importante tener personas educadas en ese planeta. De lo que estoy en contra, es del sistema educativo que se ha implementado desde hace años, del que fui parte, y de lo que aprendí en él.
Expandamos un poquito en esta idea, y veamos cómo es que tiene sentido para mí este argumento. Desde pequeños aprendemos a hablar, luego a escribir, y al final a leer. Todo esto es básico para formarnos como personas y sobrevivir en este mundo en el que estamos. Después de esto, aprendemos a memorizar, y es ahí donde comienza mi problema con el sistema educativo actual.
Bastantes personas exitosas que conozco tuvieron problemas para pasar los primeros 12 grados de la escuela, o 15 si contamos el Kínder. Unos no se podían aprender las fechas de historia y reprobaban exámenes (incluyéndome a mí), otros no entendían cómo es que se sacaba el seno y coseno, y algunos más no se pudieron aprender toda la tabla periódica de los elementos.
Lo mismo pasa después de esos años cuando entramos a la universidad o a una institución de educación superior. En educación superior es un poco menor el problema, ya que las clases son más especializadas a lo que uno quiere aprender y dedicarse en un futuro, pero sigue estando presente. Como saben, estudié desarrollo de software en una institución canadiense. Cuando entré a la institución en la que me formé, decidí tomar unos ramos extras un poco más enfocados a negocios. Hice esto para complementar mi educación como desarrollador de software y alinearme con mis planes a futuro de tener una compañía. También tomé algunas clases de redacción y escritura.
El contenido en sí no era mi problema, mi problema era que las personas que enseñaban este contenido no tenían la experiencia de haber vivido lo que transmitían en sus clases. En la clase de plan de negocios, varios maestros tenían un postgrado, maestría o hasta doctorados en negocios y planeación, pero nunca construyeron un negocio desde cero, siempre se dedicaron a ser maestros. En clases de emprendimiento, eran raros los maestros que habían emprendido alguna vez en su vida, pero sabían bastante de la teoría. Y en las clases de lectura y redacción, eran escasos los maestros que habían escrito en sus vidas algún artículo, texto literario, o al menos un blog como este.
No sé si me estoy dando a entender hasta ahora cuál es mi problema principal sobre el sistema educativo actual. Varias de las personas que nos transmiten los conocimientos saben mucho, y son muy buenos aprendiendo y explicando cosas. Pero solo saben lo que los libros les enseñaron, y no lo que la vida les brindó cómo experiencia.
Puedo decir con certeza, que en estos dos años que he sido dueño de negocios, y formado parte de asociaciones he aprendido más de como se mueve el mundo, que en mis más de 15 años que estuve sentado en un pupitre, leyendo libros sobre teoría, y memorizando lo que vendría en el examen. En la vida real no es una simple mala nota la consecuencia de una mala decisión, en la vida real se pierde dinero, socios, amistades, y hasta familia.
Algo que sé con seguridad ahora, es que no hay que tenerle miedo a apostarle a la vida y a hacer las cosas diferentes. Hay que quitarnos de la cabeza en qué pasaría si lo perdemos todo y arriesgarnos a perderlo todo. A mayor riesgo mayor posibilidad de ganancia. Si lo perdemos todo, total logramos conseguirlo una vez, es muy posible que lo consigamos una segunda. Apostando en este juego de aprendizaje infinito llamado vida, lograremos cosas que no lograríamos quedándonos en nuestra zona de confort. La vida es de los valientes que se atreven a vivir, y no se conforman con el simple hecho de sobrevivir. ¡Atrévete a hacer algo diferente hoy! Y deja que la escuela de la vida se encargue de pasarte o reprobarte, pero recuerda que aun reprobando se logra tener un gran aprendizaje.
Hablando de apostar, no se pierdan el blog de la siguiente semana, donde hablaré de la importancia de apostarle a la gente, y de la importancia de tener varios soldados en un pelotón, y de como el mito de los emprendedores que se forman solos es solo eso, un mito.
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